Estamos a tu servicio, podemos ayudarte en la Parroquia de Nuestra Señora de la Visitación


Nuestra Parroquia nació en 1989 para dar respuesta a las necesidades espirituales, sociales, psicológicas de las personas, especialmente a las que viven en la zona del Burgo de Las Rozas. Es una Parroquia joven, moderna, acogedora, creativa, cercana y "en salida" hacia las persona, especialmente a las más necesitadas. 

Una Parroquia de todos y para todos

Tiene todo tipo de grupos y movimientos de la Iglesia, que es como un jardín donde crecen, se desarrollan y florecen todo tipo de flores hermosas. Aquí nadie es excluido, ni las personas ni los diversos carismas. Todos tienen cabida. 

De una forma especial se acoge a los pecadores y se facilita el sacramento de la penitencia durante muchas horas diarias, en línea  con el deseo del Papa Francisco de vivir la Misericordia de Dios para eso ha instituido el Año Jubilar de la Misericordia. 

Apoyo a las Familias

La familia, con toda su problemática, recibe atención en sus múltiples facetas: desde la formación y atención personalizada y en comunidad de los niños, los jóvenes, los matrimonios, la tercera edad, los separados, así como la preparación al matrimonio y el cuidado de los matrimonios, fomentando la comunicación, el crecimiento en el amor, la sanación de heridas... mediante la atención en la dirección espiritual, el apoyo de la Comunidad en los distintos grupos de matrimonios y de vida cristiana, la ayuda de profesionales en el C.O.F., que está a disposición de las familias de esta zona noroeste de Madrid con sus muchas e importantes Parroquias. 

una Parroquia viva y actual

La creatividad facilita la acogida de toda vida humana, ayudando a padres en situaciones difíciles.

Es Parroquia "en salida" hacia las personas alejadas de la Fe y de la práctica religiosa, mediante el apostolado personal y también por medio de los Cursos Prematrimoniales, los Cursillos de Cristiandad y los Retiros de Emaus. 

Misas vivas en las que participarás con homilias que acercan la Palabra de Dios a las situaciones que viven los feligreses, iluminando sus vidas y dando respuesta, como hacía Cristo, a los problemas concretos de sus interlocutores. 

Pretende ser "hospital de campaña" para curar las variadas heridas que se producen en el convivir diario: incomprensiones, soledad, falta de salud, de trabajo, de amor, pecados, desilusiones, fracasos...

Acércate a nosotros, descubrirás una nueva forma de vivir en Comunión con Dios y los demás.